Cada vez tomamos prestadas más celebraciones de los americanos. Ya hemos españolarizado muchas de sus fiestas y personajes como Papá Noel, Halloween o el Black Friday (seguido del Cyber Monday, claro). Ahora es el turno del Thanksgiving Day, más conocido como el Día de Acción de Gracias.
Así es. Este jueves se celebra el Día de Acción de Gracias, una de las fiestas más importantes para todos los americanos. Y como no podía ser de otra forma, los europeos también la queremos; principalmente porque cuando la comida está sobre la mesa y cuando se tiene buena compañía, no existen barreras culturales.
Si nos preguntamos cuál es el imprescindible, sin duda, es el pavo. El famoso y viral pavo asado es el verdadero protagonista de esta historia. Un dato curioso es que solo durante el día de Acción de Gracias, los estadounidenses consumen más de 200 millones de pavos para una población de 325 millones de habitantes. Haciendo cálculos, los resultados apuntan a que tocan a más de medio pavo por cabeza (un pavo suele pesar unos 7/8 kilos).
Un antagonistas es el relleno, y que al contrario de lo que muchos piensan, no va dentro del pavo. ¡Nos han engañado a todos! Se sirve de acompañamiento. El relleno tradicional se elabora con bacon, pasas, cebolla y migas de pan. Es posible añadir como extras queso o verduras. Otros dos acompañamientos son la salsa de carne o arándanos y el puré de patata. Los panecillos tampoco pueden faltar, y menos para nosotros.
Acción de Gracias también es posible para los vegetarianos, ya que en este día se consume una gran variedad de verduras asadas. ¿La más famosa? El boniato.
Hablemos de la parte favorita de cualquier menú: el postre. Siempre hay hueco para el postre. Si tu intención es decantarte por la vertiente más tradicional, no hay nada mejor que la american pie, en castellano tarta de manzana. Si por el contrario, pretendes alejarte de las raíces más convencionales, la tarta de nueces o calabaza será la mejor opción.
Ahora que tienes el menú, saca papel y boli, nos vamos a la compra.