Sí, sí… Sabemos que piensas que no necesitas hacer yoga. Es más, puede que lo hayas probado y no hayas visto resultados. ¡Pero es que Roma no se construyó en un solo día, urbanita!
Has de saber – te guste o no– que el yoga es una tradición milenaria que ha conquistado el mundo occidental (aunque tú te resistas). Esta actividad, basada en mejorar el bienestar humano, produce enormes beneficios, y no solo físicos, sino también psicológicos.
Quemar calorías
Lo que estás leyendo, 527 calorías por hora. A pesar de que el yoga es un deporte tranquilo, puede llegar a ser muy intenso, sobre todo con algunas variantes como el Bikram Yoga o el Yoga Dinámico. El secreto es solo uno: para mantener el estilo de vida saludable propio de esta filosofía, es importante mantener un cuerpo libre de sobrepeso.
Tranquilízate (pero de verdad)
Si vives estresada o sufres episodios de ansiedad, los expertos recomiendan el yoga. “Mediante las respiraciones y la meditación se llega a un estado relajación que permite reducir estos síntomas y llevar el día a día con más calma”, explican.
Más elástica y equilibrada
Mejora la concentración
Es uno de sus principales objetivos, y para ello necesitas estar serena y ser eficiente. “La meditación ayuda a mejorar la concentración del día a día y eso algo está al alcance de todos, tan solo es necesario ser constantes”.
Fortalece la salud cardiovascular
Esta disciplina combate la hipertensión y reduce los niveles de colesterol en sangre, lo que a largo plazo reduce el riesgo de padecer este tipo de trastornos.