Corre ve y dile es lo que harás cuando conozcas el restaurante de Fernando López de la Hoz. Porque a su espectacular decoración y puesta en escena (huerto urbano incluido) incorpora una carta de lo más atractiva con cocina mediterránea y platos tradicionales.
Quien es conocedor del Pinar de Chamartin y de Arturo Soria, bien sabe que la calle Caleruega es uno de sus puntos neurálgicos. Por su actividad diaria rodeada por oficina, donde podrás encontrar la redacción de el periódico “El Público” y por su ambiente más residencial al caer la noche. Allí podrás encontrar Corre ve y dile (c/ Caleruega, 102) el proyecto más personal de Fernando López de la Hoz, quien se embarca en el mundo de la gastronomía con un proyecto de interiorismo brillante, un restaurante con zona de barra y varios salones – y dos terrazas.
Todos los ingredientes para un éxito asegurado, más aún cuando el olivo (un símbolo tan icónico del Mediterráneo) cobra protagonismo para dar pie a una carta con platos tradicionales españoles. En ella, los mejores productos de temporada, siempre respaldados por las sugerencias del chef, Alex Jiménez, cuentan con una cuidad selección de materias primas y un pequeño huerto urbano con el que condimentar sus platos.
Un concepto con recetas saludables, guisos con esencia y riquísimas elaboraciones en las que no hay fallo. Entre sus platos destacan los torreznos de Soria, la burrata con tartar de tomate con toques de granada y aceite de albahaca, huevos con chanquetes o los riquísimos daditos de solomillo al ajillo con tomillo. Picoteo, carnes y pescados donde no pueden faltar unos deliciosos postres caseros, como su impresionante tarta árabe o la cremosa tarta de queso.
