Hola mamá. Hola abuela. Hola hermana. Hola amiga. Hola vecina. Hola, tú. Feliz día de la mujer, preciosa. Viernes 8 de marzo de 2019, feliz Día Internacional de la Mujer.
Aunque todos los días son días de la mujer. Y ojalá no tuviera que felicitarte, ni animarte a seguir luchando por el artículo número 3 de la DDHH. Ojalá no fuera tan complicado. Pero para eso estamos, para convertir el ojalá en ‘lo hemos conseguido’.
Hoy es un día para hacer mucho ruido. Para manifestarnos y, sobre todo, para que nos escuchen. Las mujeres luchamos por nuestros derechos. Todas somos feministas (o al menos deberíamos).Porque el feminismo solo busca la igualdad política, social y judicial. Así que, por favor, dejaros ya de tanta mamarrachada. ‘Feminista’ y ‘femenina’ no son conceptos enfrentados, son aliados.
Según Infojobs, pasamos una media de ocho horas al día conectados a Internet (posiblemente, más). No creo que cueste mucho buscar qué significa feminismo en Saint Google. Porque todo el mundo opina sobre este movimiento social-político, pero muy pocos saben realmente qué es lo que defiende. La ignorancia es lo que nos mata. Y hablar sin propiedad es lo que nos hunde.
No obstante, no tenemos que quedarnos solo con lo malo. Podemos presumir de que cada vez somos más las mujeres que nos envalentonamos. Ya no nos dejamos pisotear, somos fuertes y hemos dejado de tener miedo. Somos mamás, abuelas, hermanas, hijas, amigas, vecinas, compañeras,… Somos humanas y formamos parte de la sociedad. Somos válidas y lo demostramos aunque no tengamos por qué.
Tenemos complejos porque la sociedad nos ha obligado a tenerlos. Al mismo tiempo, también lidiamos con lo que se espera de nosotras, porque el maquillaje, la depilación y la moda (sea sexy o no) no una imposición, sino una elección.
Toda mujer, sea como sea, es maravillosa. No existen medidas perfectas, no existe la perfección. Porque somos capaces de todo. Por eso y por todo lo demás, feliz Día de la Mujer.