No hay día de Reyes sin chocolate…, ¡ni sin su roscón! Una tradición que cada vez gana más adeptos y que en Madrid ya cuenta con su propia lista de favoritos. ¿Quieres saber dónde comprar el mejor Roscón de Reyes?
Mia Bakery
Si hay un postre navideño que se lleva la corona es, sin duda, el Roscón de Reyes. Este año en Mia Bakery (c/ de Víctor de la Serna, 6) han decidido aliarse con la marca española de joyería Itemporality para poder hacer aún más especial su Roscón de Reyes. 40 de sus roscones, escogidos aleatoriamente, incluirán en su interior una joya sorpresa especialmente seleccionada para esta ocasión. Una forma de aumentar la emoción por encontrar una sorpresa dentro del roscón, un dulce que no puede faltar en las fiestas. Gracias a su amasado a mano con agua de azahar natural y coronado con almendras y un azúcar perlado súper esponjoso se consigue un manjar tan irresistible, además, ahora podrás encontrar una joya entre su relleno de nata 100% natural.
Levaduramadre
Si hay una complicación en el “mundo rosquil” esa es sin duda la masa madre. Y no por complicación, sino por tiempo. La fermentación de las masas es larga y puede ser incierto el periodo de finalización de la misma, por lo que muchos artesanos optan por otras alternativas más sencillas. En Levaduramadre (c/ Príncipe de Vergara 2) no es así. Y la la diferencia es tan grande que no querrás comer otro porque la suavidad, esponjosidad y aroma no tienen comparación, no solo con los industriales (que damos por supuesto), sino con los elaborados con impulsores químicos.
Leitmotiv Deli
Los celiacos también tienen derecho a disfrutar de este riquísimo dulce, por eso en Leitmotiv Deli (c/ Sepúlveda, 6. Alcobendas) ofrecen un roscón preparado con trigo sarraceno, huevos, ralladura de limón + naranja y leche sin lactosa entre otros ingredientes, de modo que todos puedan degustar este típico producto que pone el broche de oro a la Navidad.
Crustó
El obrador de Crustó (c/ Hortaleza, 78) es uno de los más reconocidos de la capital (cada año elaboran más de 3.000 unidades) y su receta se mantiene fiel a la original. Base de bollo brioche, elaborado con masa madre y lenta fermentación que aporta esponjosidad y suavidad al producto, con toques de agua de azahar y ron que le dan un sabor y aroma únicos. Elaborado de forma artesanal (a mano) uno a uno está disponible con sabor nata, trufa y sin relleno.
Horno San Onofre
Es un clásico (y uno de nuestros imprescindibles). Esta histórica pastelería madrileña renace como el ave Fénix, impulsada por Ana y Mónica Guerrero, hijas del propietario. En el Horno de San Onofre (c/ San Onofre, 3) la renovación ha llegado muchas de sus especialidades y también al roscón de Reyes. Fiel a las tradicionales frutas escarchadas y el azúcar en granillo es tal vez el más popular en cuanto a sabor con las notas de agua de azahar pronunciadas. Algo más seco que otros, es ideal para mojar en chocolate como manda la tradición.
Moulin Chocolat
Es sin duda uno de nuestros grandes descubrimientos. La lenta fermentación de los roscones se traduce en una miga elástica y esponjosa, con la humedad adecuada; un amasado justo que le aporta finura, y el uso de ingredientes de gran calidad, entre los que destaca la mantequilla francesa y el agua de azahar destilada de la firma Luca de Tena (Sevilla), mucho más sutil que las esencias artificiales de azahar. En Moulin Chocolat (c/ Alcalá, 77) no añaden ni frutas confitadas ni rellenos –aunque por encargo lo rellenan de nata o crema de chocolate–, solo azúcar y almendra molida. Dura dos días en perfectas condiciones. Para Ricardo Vélez el tamaño perfecto es el roscón de 500 gramos, ya que guarda las proporciones adecuadas para la fermentación larga y el horneado.
