Guerreras. Románticas. Bohemias. Rockeras… Los personajes de nuestras series favoritas marcan tendencias. A veces queriendo, y otras sin querer. ¿La razón? La diseñadora de vestuario Helena Sanchís nos cuenta por qué.
Una. Y otra. Y otra vez. Urbanita, sabemos que cuando hay una peli o una serie te gusta, las veces que la veas no importa. Porque te seguirá encantando. Y sí, adoramos la música, la trama y que sean ellas las que los besan a ellos, pero hay algo de lo que quizás no te has percatado: los estilismos.
Eso es. La moda influye más en el cine y en la televisión de lo que nosotros pensamos. ¿Por qué, si no, todas querríamos tener el armario de Carrie Bradshaw o el de Fallon Callington? Y no sé vosotras, pero yo mataría porque una de las dos me dijera: “hey, babe, you can take whatever you want it”. Además, no tienen por qué estar ambientadas en nuestra actualidad, las de los años 40, 50, 60, 70, 80, 90… Todas cuentan y todas influyen. Y si algo tienen claro las tendencias, es que la moda es cíclica. Por eso, hablamos con la diseñadora de vestuario Helena Sanchís, conocida por haber creado los vestuarios de las series “Alta Mar”, “Las Chicas del Cable”, “Velvet” “Tiempos de Guerra” y “Gran Hotel”, entre otras. Porque si algo tiene claro es que tiene “suerte de poder dedicarme a una profesión que amo: vestir personajes, con todo lo que eso implica en este oficio”.
“Todos “juzgamos” según la apariencia externa, es decir, según el vestuario. Por como viste una persona puedes deducir su ámbito social, económico, edad, y por supuesto el carácter”
Aunque no todos dirían que esta realidad es la que es. Por tanto, y para tratar de explicar la importancia de este mundo a alguien que no lo entienda, la diseñadora de vestuario cita las realidades cotidianas. Porque todos nos vestimos de manera diferente, tenemos un estilo, y unos colores. “Y además, todos “juzgamos” según la apariencia externa, es decir, según el vestuario. Por como viste una persona puedes deducir su ámbito social, económico, edad, y por supuesto el carácter”, nos cuenta Helena Sanchís.
¿Otro factor imprescindible? El color. No trasmite lo mismo una persona que va vestida de rojo que otra que va de gris. Y en el mundo de las series, es el color quien da vida (y tono) a las historias. “Puedes hacer un vestuario en tonos fríos o muy colorista, pero lo que está claro es que no utilizas la misma gama para una comedia que para un thriller”, nos explica.
No obstante, cada proyecto es distinto y hay que sumergirse en el mundo que tienes que trabajar. “Si es época, hay que buscar y documentarse de todas las maneras posibles. También en el mundo contemporáneo en el ámbito de los personajes y en ellos mismos, por supuesto”, nos confiesa la diseñadora de vestuario. Aunque su pasión es buscar la inspiración en el arte más absoluto. “Yo siempre busco referentes en la pintura, la fotografía o el cine, trabajo con una gama de colores que busco según lo que quiera contar el director y, por último, hago pie en los personajes e intento acercar el físico de los actores a ellos”, añade.
“Los personajes por sí mismos y en solitario no son nada, necesitan un contexto, un proyecto en el que vivir”
Y da igual si son personajes románticos o de acción. Cada detalle cuenta y en estos últimos hay que sumarles, además de un diseño puramente visual, un montón de condicionantes técnicos que los hace muy interesantes. Sin embargo, para Helena Sanchís, lo más importante destacar que “los personajes por sí mismos y en solitario no son nada, necesitan un contexto, un proyecto en el que vivir”.
Pero ¿hasta qué punto llega su profesión? Desde averiguar las ideas del director hasta construir todos y cada uno de los personajes. “Tienes que encontrar la manera. Cuando el actor está vestido tiene que transmitir lo que el director tiene en la cabeza”, nos explica. Y no solo eso, sino que las diseñadoras de vestuario imponen modas. “Es halagador recibir comentarios como ese, pero nunca sabremos qué va primero, si el huevo o la gallina… Hay tendencias, incluso en las épocas de los proyectos. Si no, ¿por qué de repente se hicieron tantas series en los años 50?”, argumenta la diseñadora de vestuario de series como “Velvet” o “Gran Hotel”.
“Tienes que encontrar la manera. Cuando el actor está vestido tiene que transmitir lo que el director tiene en la cabeza”
Sin embargo, si algo tiene claro Helena Sanchís es que, a pesar de que todos sus personajes no van a la moda, el vestuario lo dice todo sobre nosotros. “No te vistes igual si te levantas más o menos contento, si es de día o de noche, si hace frío o calor, si vas a hacer una cosa u otra. Y aunque evidentemente la moda nos influye a todos (no hay más que tirar de hemeroteca), por suerte cada uno de nosotros somos diferentes. Solo hay que mirar a nuestro alrededor”, concluye.