Una silueta femenina que se dibuja sobre un mapamundi. Mezclas divertidas que crean Tortuchofas. Fotografías de amigos, influencers y ediciones limitadas que hacen de cada Pils Ferrer una obra de arte.
Madrid. Architect. Collage Artist. Es tu carta de presentación en Instagram, ¿cómo ha sido el camino?
Siempre me había gustado muchísimo pintar, de pequeña me encantaban todas las manualidades. Empecé Arquitectura y cuando teníamos que presentar un proyecto teníamos la posibilidad de hacerlo en 2D o 3D, pero a mí me gustaba hacer un fotomontaje con los edificios y superponía fotografías. Pero no fue hasta cuatro de carrera, cuando me fui a Perú un año de convenio, cuando empecé a utilizar fotos diferentes en las fotografías de mis amigos, con flores o el espacio. Quizá estos fueron los primeros Pils Ferrer.
Una idea me gustó mucho y, cuando se casó mi primo, fue él quien me encargó los meseros. La idea era utilizar imágenes de grupos de música, pero con un toque diferente, y en una foto de Los Panchos reemplacé la guitarra por un aguacate. Nos hizo mucha gracia.
¿Cuáles fueron tus primeros encargos?
Una de mis amigas, María Fdzez-Rubíes, subió uno de mis collages a Instagram y empezaron a contactarme… Fue impresionante, me pedían muchos diseños personalizados, pero yo quería hacer los míos propios y fueron los que empezaron a tener muchísima acogida.
Cuentas con casi 15K seguidores y cada una de tus fotos tiene cientos de “me gusta”…, ¿pero tú a quién sigues?
A los Museos de Madrid porque siempre están compartiendo las exposiciones, muy pocos influencers (excepto a mi amiga María) a muchos comisariados de arte, muchos temas de conciertos, que no quiero perderme… Alguna marquita de ropa que me pueda interesar, pero sobre todo a Museos, también en Londres, y a arquitectos como MVRDV o Norman Foster. Es muy poco friki, pero es lo que más me interesa – la vida de mis amigos la sigo por Facebook e Instagram es un perfil más profesional.
Si tuvieras que elegir: ¿digital o papel?
Es verdad que yo ahora estoy haciendo todo digital, con el ordenador, pero lo que más me apetece es pintar un lienzo coger papel de diferentes texturas y hacer un montaje más analógico. Es verdad que el collage nació así y me gustaría poder hacerlo aunque necesite algo más de tiempo.
¿Un Pils Ferrer con el que te sientas más identificada?
Yo creo que los que más me gustan y los que más pueden contar de mí son las yuxtaposiciones de mujeres actuales con otras antiguas. Si te fijas en toda mi obra parece que estoy bastante obsesionada con la feminidad, pero dicen que lo que conoces es lo que mejor puedes trabajar. Y es así. Por eso me gusta el contraste de una fotografía de Cindy Crawford con un cuadro de Botticelli, que mezcla el arte clásico con la mujer actual… Tengo unos seis cuadros de esta serie y son mi ojito derecho.
Una manía cuando necesitas concentrarte a la hora de trabajar….
Siempre escucho música, me gusta aislarme. Cuando estoy muy concentrada pongo BSO o música clásica. Cuando ya veo que tengo la idea encaminada o estoy divirtiéndome más prefiero los Beattles o los Rolling… Metronomy también me encanta, es un grupo inglés que hace música ochentera un poco electro. Y canta autores españoles como Serrat o Joaquín Sabina. De hecho, me acaba de regalar mi novio unos cascos inalámbricos y estoy como loca, que me paseo por la casa con ellos puestos escuchando música.
Sobre tu mesa, ¿cuáles son tus imprescindibles?
Aunque trabaje con el ordenador siempre me gusta hacer los primeros bocetos a mano, es mi forma de plantearlo, y siempre tengo un Moleskine al lado. Soy muy maniática con los bolígrafos, siempre utilizo el Pilot GT 04, además me gusta en un color sepia.
Has creado collages junto a Karin Becvarova o Lucía Bárcena, ¿a quién te gustaría customizar?
Muchos de mis collages son con amigas mías, como es María Fdez-Rubíes, a Lucía Bárcena la contacté por Instagram y le encantó la idea. No sé quién me gustaría hacer, siempre voy buscando ideas diferentes.
Tus obras son en edición limitada, ¿por qué?
Son ediciones digitales, pero quería que fueran especiales, únicas, que no se pierda ese valor del collage.
¿A ti te gusta coleccionar?
Sí, también. Aquí donde estamos haciendo la entrevista compré mi primer cuadro de un artista que se llama Guillermo y me gusta muchísimo. También acabo de comprar uno a un artista que se llama Paul Antón que es de Navarra, está viendo ahora en Londres, también hizo arquitectura y estuvo trabajando para Foster – el admiro muchísimo, viene la próxima semana a Madrid (aprovecha para traerme el cuadro) y estoy deseando conocerle.
Entre los encargos que has recibido, ¿cuál ha sido el más especial?
Me hizo mucha ilusión que una compañera de trabajo de Sara Carbonero le comprara un cuadro y lo publicara en las redes sociales… Pero los encargos más especiales son los de mi familia y mis amigos, ellos son los que más me apoyan, siempre vienen a las exposiciones, tienen mis fotos de fondo de pantalla en el móvil…
¿Cómo definías tu estilo?
Como estilo de collage, es verdad que ahora le podría poner el apellido de digital, pero no quiero quedarme aquí. Me gustaría hacer fotografías yo, mezclarla con texturas e incluso con telas. La técnica del collage es infinita. Y si tuviera que definirlo yo creo que es juvenil, muy enfocado hacia la naturaleza y “un arte para todos”, muy enfocado a gente de mi edad que igual se acaba de mudar a su primera casa y que quiere tener algo divertido y diferente.
De volver a nacer, ¿qué te gustaría hacer?
Si tuviera que volver a nacer, elegiría el mismo camino, porque me encantó. Pero si pudiera elegir (teniendo lo que he hecho ahora) igual me hubiera gustado hacer Biología Marina, porque me encantan los animales, Historia del Arte o Filosofía. Aunque de pequeña siempre dije que quería ser inventora.
Tu primera exposición fue en The Hat en abril de 2017. Ahora estás en Ynot Studio, pero ¿dónde te gustaría exponer?
Exponer es una experiencia estupenda porque a mí me gusta el poder recibir a la gente y, al estar fuera de una galería de arte, el ambiente es más informal. Es verdad que Laura Somoza, que le encantan mis collages y que he colaborado con ella con su marca de joyas, Ouibyou, ahora me ha ayudado para participar en una exposición que organiza Media Advance –un espacio de trabajo de trabajo que además es galería–, en Gijón y me apetece muchísimo.
Por último, dentro de tu bolso: ¿qué podemos encontrar?
Justo ahora lo acabo de cambiar, porque me muevo en bici en Madrid y es más cómodo que sea cruzado (y más pequeño). Llevo tickets y facturas, que como soy autónoma tengo que guardarlos todos, un cepillo de pelo (me da mucha vergüenza, porque es de Hello Kitty), mis tarjetas, unas lentillas, una barra de labios, mis Pilots y un cuadernito, unas chuches, la entrada de la exposición de Andy Warhol y junto a las llaves un mini metro para tomar las medidas.